BLOQUE 2. LA PERCEPCIÓN AUDITIVA
TEMA 3. LA PERCEPCIÓN MUSICAL
1.Sonido y música
El sonido para el niño es la materia prima, la sustancia básica que "plásticamente" da forma, configura y conforma la expresión musical.
1.1. El sonido. Fundamento para la percepción y la expresión musical
a) Naturaleza del sonido
b) Definiciones
c) Ruido
d) El silencio
1.2. La Música
La música es un acto de comunicación que sigue unas normas de lenguaje que le confieren una abstracción.
2. Parámetros sonoros
Los parámetros del sonido son los factores que integran y producen el fenómeno sonoro. Existen dos tipos de parámetros:
- Subjetivos. Son aquellos que definen las sensaciones de la escucha.
- Objetivos. Son mensurables físicamente.
Relación entre parámetros sonoros subjetivos y objetivos
Estos, a su vez, dan origen a los componentes musicales que son los elementos sonoros que conforman, las estructuras musicales, los textos sonoros.
2.1. Altura o tono
El tono o altura de un sonido es la cualidad por la cual este parece agudo o grave.
Las magnitudes y unidades de medida con las que se establece la altura o tono de los sonidos son:
- Altura. La unidad de medida con la que se mide la altura o tono de un sonido es el mel. Por definición, un sonido sinusoidal con una frecuencia de 1.000 hercios y un nivel de presión sonora de 40 dB, produce una sensación de altura de 1.000 meles.
- Frecuencia de una onda sonora. Es la velocidad con la que oscila esta. Se mide en hercios (Hz).
- Nivel auditivo. Sensibilidad del oído en función de la altura del sonido. La graduación es subjetiva y es una comparación con un sonido de referencia de frecuencia igual a 1 KHz, cuyo nivel de presión acústica proporciona una base de comparación. Se trata, por tanto, de una magnitud que afecta a varios parámetros sonoros de forma simultánea. Se mide en fonos.
En el lenguaje musical la altura está identificada por unos signos llamados notas musicales: do, re, mi, fa, sol, la y si. Éstas a su vez se organizan en escalas.
Las distancias entre las notas se llaman Intervalos, y cuando se superponen forman los acordes, imprescindibles para el acompañamiento de canciones.
2.2. Intensidad
Desde la perspectiva física, la intensidad sonora es el valor medio de la energía sonora que atraviesa la unidad de área perpendicular a la dirección determinada en el punto considerado.
Desde el punto de vista psicofísico, la percepción de la intensidad sonora es un fenómeno auditivo muy complejo, mucho más que el de la altura.
Mientras la potencia acústica evoluciona de forma lineal —respuesta física—, el oído humano lo hace de forma logarítmica —respuesta humana—. Fernández de la Gándara (1994) representa, así, las escalas de intensidad en función de la actividad receptiva del oído:
2.3. Timbre
- Parciales concordantes. Son semejantes a la serie armónica derivada de la fundamental. Se les denomina armónicos.
- Parciales discordantes. No son semejantes a la serie armónica y, por lo tanto, no son armónicos.
2.4. Duración
La duración de un sonido es su longitud en el tiempo.

3. La audición. La percepción sonora. Aprender a escuchar.
La percepción auditiva la podemos definir como la llegada directa o indirecta del sonido al oído. En esta percepción intervienen distintos agentes.
La percepción es el proceso por el cual recibimos información del ambiente exterior y supone un proceso complejo en el que influyen una serie de factores como: atención, memoria, conciencia, imaginación, estado afectivo, otros campos perceptivos, etc. (Bernal, 2003: 2)
Como docentes, el conocimiento de la anatomía y fisiología del oído puede ayudarnos a comprender los límites de la audición y reconocer los peligros que entrañan ciertas prácticas de escucha tan perjudiciales para nuestro oído y nuestro cuerpo.
3.1. Experiencias perceptivas
Cuando los adolescentes y jóvenes comiencen a saber respetar y comprender que hay diferentes tipo de música, histórica, profana o religiosa, tradicional de nuestro entorno y de otras culturas, además de su música más habitual, y que no son incompatibles unas de otras, sino que pueden formar parte igualmente de nuestro repertorio cotidiano, cada una en su momento; cuando al mismo tiempo puedan disfrutar de todas ellas por igual, porque ha podido conocerlas, aprenderlas y comprenderlas, siguiendo un proceso natural en su aprendizaje, al igual que escuchan “su música”, entonces, y no antes, estarán cumplidos en su totalidad los objetivos del educador musical. (Barrios, 2002: 19)
Una actitud que invierte decididamente la realidad habitual en las aulas, la cual gira de manera casi exclusiva alrededor de los conocimientos tradicionales –el aprendizaje de alturas y duraciones, la notación- y del empleo de instrumentos y ejemplos musicales cuyo eje está ocupado por el sistema tonal y que, precisamente por centrar y restringir el concepto de música alrededor de tales prácticas, condiciona e impide que otras realidades musicales, con otros timbres, otros sistemas u otra nacionalidad, sean consideradas Música al mismo nivel. (Alacázar, 2008b: 35)
3.2. La exploración sonora
TEMA 4. LA AUDICIÓN
1. El oído
- Oído externo: Pabellón auricular, conducto auditivo externo (3 cm)
- Oído medio: Tímpano, cadena de huesecillos y trompa de Eustaquio.
- Oído interno: Cóclea, vestíbulo, conductos semicirculares.
1.1. El concepto de audición
El concepto de audición constituye los procesos psicofisiológicos que proporcionan al ser humano la capacidad de oír.
1.2. Equilibrio
- Conductos semicirculares y vestíbulo: pelos que detectan cambios de posición de la cabeza
- Los ojos y otras células sensoriales de la piel y tejidos internos también ayudan a mantener el equilibrio
- Cuando el laberinto del oído está dañado o destruido surgen los problemas de equilibrio, de mantenerse de pie con los ojos cerrados sin tambalearse o caerse
2. El aparato fonador
Es un conjunto de órganos implicados en la producción del habla: órganos del habla.
No están específicamente diseñados para esta tarea.
Todos los órganos que lo componen cumplen otra función (repsiración, masticación...).
La evolución de la especie humana ha sido decisiva en la especialización de estos órganos para el habla.
- Importancia de la laringe
Función primitiva: evitar la entrada de comida en los pulmones.
Posición más baja que en los pulmones.
- Importancia de la lengua
Reducción del tamaño.
El cometido de los órganos del habla es:
- Crear una corriente de aire.
- Ponerla en movimiento.
- Modificarla para crear los diferentes sonidos,
Partes del aparato fonador:
3. Principales trastornos auditivos infantiles
Los tipos de sordera están relacionados con la localización de la lesión. El aspecto funcional de una sordera es diferente según el lugar donde se encuentre la lesión que ocasiona esta sordera.
El tipo de sordera también depende de la etiología de la misma, es decir de la causa.
Clásicamente se reconocen 3 tipos de sordera:
- SORDERAS DE CONDUCCIÓN.(La lesión se sitúa en el oído externo o en el medio).
Al déficit auditivo en el oído externo también se le denomina sordera de transmisión.
Oído externo: está formado por la oreja y el conducto auditivo externo. La oreja es el refractor de las ondas. El conducto auditivo externo tiene como función producir cerumen y reforzar ligeramente algunos armónicos. Una alteración a este nivel provoca una obstrucción a las ondas sonoras. Las alteraciones del oído externo provocan sorderas ligeras, generalmente reversibles con tratamiento médico y audioprotésico.
Oído medio: comienza en el tímpano, continua con la cadena de huesecillos, que son el martillo, yunque y el estribo; este último cubre la ventana oval que da al oído interno. Esta cadena es la encargada de conducir las ondas sonoras. El oído medio también es el encargado de proteger de las elevaciones bruscas, ya que al contraerse los músculos se aumenta la rigidez de la cadena de huesecillos. La cavidad del oído medio debe mantener unas condiciones de ventilación y equilibrio de presión respecto al exterior para asegurar así, un buen funcionamiento del tímpano y la cadena de huesecillos.
Algunas de las anomalías del oído medio pueden ser: un tímpano poco funcional por roturas, hiperpresiones o hipopresiones del oído por una mala ventilación u otitis, alteraciones congénitas en la cadena de huesecillos, alteraciones óseas degenerativas…
Las alteraciones del oído medio son cuantitativas, es decir, se sigue oyendo pero la intensidad suele ser insuficiente.
Las causas y tipo de sordera del oído externo y medio son:
Obstrucciones en el oído externo: debidas a tapones de cera y diversos cuerpos extraños que obstruyen el canal auditivo. La pérdida de audición no supera los 30- 40 decibelios.
Obstrucciones al sonido en el oído externo- medio: cuando el sonido encuentra una obstrucción en el oído medio (como la agenesia: nacer sin oído externo, medio o sin ambos) la pérdida es como máximo de 50 a 60 decibelios. No hay distorsión y la vía ósea es normal.
Obstrucción tubárica: la trompa de eustaquio no se abre con regularidad y el oído medio estará con menor presión que la atmosférica, dificultando la transmisión de las ondas sonoras por el oído medio. Al comienzo la pérdida es ligera y va aumentando hasta un máximo de 50- 60 decibelios de pérdida.
- SORDERA NEUROSENSORIAL (La lesión se localiza en el oído interno).
Oído interno: aquí las ondas sonoras son transportadas por los líquidos linfáticos de la cóclea. Las vibraciones acabarán excitando las células sensoriales que hay en la cóclea. Estas células forman el órgano de Corti, que es el encargado de traducir las vibraciones de un líquido a un código de señales bioeléctricas que pueda ser transportado por el sistema nervioso. La función del órgano periférico de la audición termina cuando las señales bioeléctricas se reúnen en el nervio auditivo situado a la salida de la cóclea.
Según el número de células neurosensoriales afectadas en la deficiencia auditiva, habrá un componente cuantitativo de la pérdida. Y según el tipo de células afectadas tendremos también un componente cualitativo.
Las causas y tipos de sorderas neurosensoriales son:
Alteraciones vasculares y de los líquidos linfáticos del oído interno: la alteración de los líquidos linfáticos se llama estriovasculopatía. Estas alteraciones comprometen las presiones de los líquidos, originando así una modificación de la transmisión sonora. En los primeros episodios suele reestablecerse la audición lentamente. Los grados de pérdida son variables. Es una sordera que afecta al aparato nutritivo de las células neurosensoriales.
Traumatismos: son de tres tipos:
1. Por descompresión brusca.
2. Por onda expansiva a causa de una explosión.
3. Por traumatismo sonoro:
Ruido intenso de duración corta.
Ruido no intenso de larga duración.
Hay afectación al oído interno y en algunas ocasiones al medio. La afectación suele ser mayor en los agudos que en los graves.
- Sorderas por intoxicación: los tóxicos que más afectan el oído son medicamentos: salicilatos, quinina, estreptomicina y kanamicina, también el arsénico, el óxido de carbono y el tabaco. La toxicidad de una droga depende de la dosis administrada, la duración de la administración y la susceptibilidad de la persona. Son pérdidas en las que la inteligibilidad está muy afectada. Son pérdidas de grado variable, con predominio de frecuencias agudas, 4000- 8000 Hz. Si persiste la administración serán afectadas el resto de las frecuencias.
- Sorderas por infecciones generales: como gripe, meningitis, fiebre tifoidea, parotiditis. A veces la sordera es el único síntoma que aparece posteriormente sin que el cuadro infeccioso general haya sido manifestado o ya haya sido olvidado. Las infecciones generales pueden tener origen en la madre del gestante y producir efectos en el feto.
- Sorderas debidas a neurinomas: un tumor que afecta al nervio auditivo y al órgano de Corti. El grado de pérdida es variable. Es unilateral, pero puede terminar afectando al otro oído. Es una pérdida neurosensorial retrolaberíntica.
- SORDERA MIXTA.
Cuando la lesión o deficiencia s encuentra en el aparato de transmisión (conducción) y en el nervio acústico a la vez.
Es una sordera de transmisión o conducción y de percepción.
- SORDERA DE TIPO CENTRAL.
La vía auditiva está formada por el nervio auditivo y el nervio vestibular. A la salida de la cóclea se reúnen las señales en el nervio auditivo, junto a este se encuentra el nervio vestibular, que surge del órgano del equilibrio situado junto a la cóclea.
La conducción nerviosa es una conducción electrofisiológica. Las células encargadas de esta conducción recubren el nervio y conforman la mielina.
La vía auditiva es una de las primeras que se empieza a mielinizar y tarda en completar su maduración entre 6 y 8 años.
Esta vía no es de tipo rectilíneo, tiene estaciones de relevo donde las células neuronales establecen intercambios de información con otros circuitos neurológicos. Parte de la información auditiva del oído izquierdo se cruza a la vía auditiva del oído derecho y viceversa. La llegada de ambas señales se ajusta a los núcleos nerviosos del tronco cerebral para que percibamos el aspecto temporal de la percepción auditiva.
Se piensa que la persona sorda tiene en mayor o menor medida disminuida la percepción temporal de la audición.
Las alteraciones entre las interconexiones con otras vías, la posición de equilibrio cefálico, desviaciones reflejas de la mirada y algunos circuitos motores; es decir, del tronco cerebral, producen sordera de tipo central.
Este tipo de sordera está menos estudiado y tampoco existen soluciones de tipo médico para la misma, así como no nos aporta su diagnóstico unas pautas claras de intervención pedagógica.
La causa y tipo de sordera:
Lesiones en el tronco encefálico: en el bulbo, la protuberancia o en el mesencéfalo. Obedecen a fenómenos comprensivos (tumores) o vasculares (riego sanguíneo). Puede haber manifestación de pérdida tonal, cuando hay esta pérdida los grados son variables. Hay alteración de la adaptación auditiva y en los aspectos rítmicos del sonido.
La corteza cerebral: aquí se realiza la simbolización de los elementos sonoros, es decir, la comprensión. Pero la comprensión no debe considerarse en sentido estricto un fenómeno auditivo.
- SORDERA CORTICAL.
Alteraciones auditivas a nivel de la corteza auditiva: las sorderas son por fenómenos comprensivos y vasculares. Pueden obedecer a lesiones evidentes o alteraciones de tipo funcional. No se trata de una sordera tonal, aparecen trastornos de integración auditiva de sonidos puros y complejos.
- SORDERAS CONGÉNITAS.
Congénito quiere decir en el momento en que nos damos cuenta de que un niño es sordo. Esta sordera puede producirse por cualquiera de las causas anteriores, siempre y cuando se den antes del nacimiento.
- SORDERAS GENÉTICAS.
Originadas por alteraciones o predisposiciones que uno o los dos padres aportan al niño en la dotación genética. La mayor parte de estas sorderas son recesivas y no dominantes. Las sorderas genéticas recesivas suelen ser las más frecuentes, suelen ser severas o graves, bilaterales, progresivas y pueden asociarse a otro tipo de alteraciones.
4. Intervención en el aula
El desarrollo del niño sordo, y/o con discapacidad auditiva es, a priori, normal siempre que sus necesidades comunicativas y de información estén cubiertas.
No todos los alumnos sordos van a tener las mismas características y necesidades, estamos hablando de un colectivo muy heterogéneo. Son cuatro los factores que determinan esta heterogeneidad:
- El grado de pérdida auditiva
- El momento en que se produce la pérdida auditiva
- Las causas que la provocan
- Los factores educativos y comunicativos.